Expresión Libre

lunes, 18 de mayo de 2015

Colibrillo / Vocaur


 Espera...espera...pronto nacerá...
No te hago falta...
No me haces falta...
pero por favor espera...pronto nacerá...
por favor espera...pronto nacerá...
...Colibríllo espera...pronto nacerá...
no me necesitas...
no te necesito...
pero Colibrillo...espera...
por favor espera...pronto nacerá...
espera...por favor...espera...
te siento aletear en mi oreja...
beber el nectar de mis ojos...
te siento pequeñito enrredado en mi cabello...
pero espera...por favor espera...
pronto nacerá...
botoncito Colibrillo...

Con tinta y en papel / Víctor Hugo Medel



Con tinta y en papel

Reafirmo mi libertad,

Libertad de soñarlas,

Libertad de dibujarlas,

Libertad de amarlas,

Con tinta y en papel

Nos volvimos amigos,

Queridas letras:

Mis ojos les escuchan

Sus risitas risueñas

En nuestro juego infantil.

Nunca olvidaré el primer día

Cuando las vi bailar

Con tinta y en papel

Tomadas de las manos

Danzaron alrededor de la blanca fogata

Y Jugamos a conquistarnos.

Con tinta y en papel

Nos volvimos uno

Con tinta y en papel

Nos volvimos íntimos.

A mí me tocó ser pobre / Prof. José Escobedo Coronado



A mi me tocó ser pobre...
En verdad... ¡rara la vida!,
Si naces en techo humilde
Cualquier pelado, ¡te trilla!

Si es el cura...
¡De mil sermones te llena!,
" La paz no está en éste mundo...
En el más allá... ¡te espera!".
Y si quieres... ¡protestar!
¡Por la injusticia terrena!;
¡No tienes escapatoria...!
¡Te excomulga!, ¡te condena!
¡Infierno en vida yo llevo...!

Y...aunque Diosito se enoje,
¡Pa’ mi que no se midió!;
En eso de... ¡la igualdad...!
No supo bien lo que hacía...;
A millones... ¡nos dio nada!
A unos cuantos, ¡oro y plata!;
Los más a trabajar duro...
Los poquitos, ¡a la holganza!


Los señores cardenales...
¡Los señores arzobispos!;
Caminan como en las nubes...
Se codean bien, ¡con los ricos!
¡Onésimo juega golf!
Y el tal cardenal Norberto...
Con zalameros sermones,
¡Exime y lisonjea al muerto!;
En las exequias de Hank...
Sin más... ¡lo declaró absuelto!
Al rico el nicho y la gloria...
Los honores... ¡y el incienso!

A mí me tocó ser pobre...
¡Qué raro es mi Padre Dios!;Si todos somos sus hijos...

¿Por qué tan mal...repartió?
¡Bien que tiene preferidos...!
Eso es... ¡discriminación!
A Fuentes le dio intelecto,
A Sin... ¡la telefonía!;
A Azcárraga Jean empresas...
Muy buen cuerpo... ¡a la Thalía!
A mi me dio la esperanza...
¡Vivir...!, ¡de la fantasía!

Una larga lista... ¡espera!
Al pobre antes de nacer;
¡Carga con la deuda externa!,
¡Con los dueños del poder!;
Sufre, se alquila... ¡se vende!
Sólo... ¡para mal comer...!;
Aporta ignorancia y llanto...
Su fuerza... ¡hasta envejecer!

¡Pero “ Dios así lo quiso “!
¡El no puede equivocarse!
Si a mí me tocó ser pobre...
Pues ni modo...a conformarse.
¡Qué se llenen los patrones!
¡Qué la libre empresa...sea!;
Que el sistema... ¡financiero!
¡Se apodere...!, ¡de la aldea!;
Que al fin y al cabo esta vida...
Va de paso... ¡pa’ quien sea!

Pero... ¡mi Diosito Santo...!
¡Aunque de hereje me trates!,
¡No me descobijes tanto!;
Ya que tienes consentidos...
Por cierto, ¡muy bien cebados!;
¡Amárralos ya un poquito!
Todos andan... ¡desatados!;
¡El robo es un gran pecado!
¿Acaso...se te ha olvidado?

¡Pobre Diosito...!, ¡en tu nombre...!
Se amparan... ¡los desgraciados...!.

¡A mí me tocó...!, ¡ser pobre...!
Y quien me explota, ¡es el hombre!

Un sueño profundo / Edgar Lara Medina


Recuerdo las campanadas repicar, mientras…
Papá entraba a misa de cuerpo presente.
Esos momentos en los que el mundo sin más,
Te refriega a la muerte en la cara, inconsciente.
Los pensamientos te obligan a pensar en cosas,
En cosas que te matan en este mundo de causas,
En los momentos sin igual, en las hipocresías,
En el lecho de pena de tu vida, en las mentiras.
Recuerdo a mi padre que decía:
“Hasta que no acabes la tarea, saldrás de casa,
Pues este mundo está lleno de penas, sin gente buena,
Y cuando seas grande… tú les darás la muestra.”
Él me educó a hacer siempre el bien,
A no esperar nada a cambio de lo que haga.
Él me mostró la traición de la sociedad
Y también me dijo de toda la maldad.
Era un padre que dio la vida por su familia
Una persona que se entregaba decidida,
7
Que siempre ayudaba a quien fuera…
Que vivía, y siempre permanecía tranquila.
Ahora que ya no se encuentra conmigo presente,
Me ha dado fuerza para seguir siempre consiente
Ayudar a los demás, pues uno mismo nunca sabe
Cuando podrá necesitar de alguien más…
Me mostró los caminos… el bueno y el malo:
El que te lleva al éxito, o el que va a las ruinas,
El que hablará bien de ti, o te ilustrará para mal.
Tú mismo te construyes, en la vida que eliges.
Dijo que habría falsos regalos… la hipocresía,
Muchos tratarían de ponerme condiciones
Con cualquier objeto… que tenía que ser fuerte,
Porque el enemigo quiere verte abajo, inerte.
Venimos a algo a este mundo…
A estorbar o bien a triunfar, a aprender,
A llorar, a vivir, a enseñar, a entender,
Sentirte mejor, a educar y creer…
Todo se lo debo a él, siempre me apoyo,
Me valoró y también me comprendió,
Ahora han pasado muchos años y él…
Permanece ahora en un sueño profundo.

Cinta del ojo de Dios / Sophie Smawley


(parte 1)

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Cuando nos hacen daño…
Ser agua, filtrarse entre los dedos, dejarlos húmedos, sal…arriba
Desde el exterior observamos nuestras espaldas, película de los ojos de Dios conscientes de lo desconocido, no hay cinta que mantenga el aliento a salvo aunque nadie desee entrar a la obra dramática, algún día nos cansaremos y jamás encontraremos las cosas donde no están.
…Entonces te desesperas y te sientes vivo porque te has dado cuenta de una injusticia. Sé quiénes son, por aquí los sentimientos no son tan diferentes. Detrás de cada error hay una estupidez, ellos lo saben, no hay pena ni quejas, tienen razón, quién haya esperado compasión recibirá una burla.
Pensaron que tenía algo, que no se entere de su mejor elección si de cualquier forma morirá hoy…
Sueles hacer que las personas no puedan y que se ahoguen en ira mientras tienen un dedo entre los ojos.
Sé que soy incapaz de hacer esto sin ti pero libero el tiempo para decaer por aquello que no tengo.

Agradecimiento / Brandon Samuel Martínez Razo

 
Hoy confió en ti, me lo has demostrado,

Cuando solo en el camino he quedado,
Tú desde el cielo has extendido tu mano,
Y me has cuidado,
Cuando de sed y hambre clamaba en el desierto,
Una copa y un plato de oro refinado,

A mis pies has puesto,
Cuando por la culpa de mis errores
Soy vencido y busco en los rincones mi lugar de olvido,
Cuando hastiado de la vida y sin ilusión estaba,
Llegaste sin que yo te buscara,
Cuando el frio me abrazaba, con tus alas me tapabas,
El aroma de tu presencia, son rosas,
Refinado, sarcillo fino anhelado,

He deseado que llegues y has estado,
¿Por qué no confiar en ti?

Si me has amado, si me hiciste de un millón elegido,
Y por mil ángeles soy cuidado.
Porque aunque he estado en problemas,
Y la crisis me ha agobiado, tu fe no faltó,
Hoy por agradecimiento lo escribo,
Hoy por amor en papel lo plasmo,
Para que en mil años, sea leído,
Y la gente compruebe, que tú sigues siendo el mismo,
El mismo que me amó, y por amor la vida dio.

El fuego que no hace combustión / Sergio Vidal


en la fiesta
cuando los perros
están bailando,
o andan de románticos
con las señoritas
o viendo las cosas diferentes
o extremadamente locos
destruyendo todos los paradigmas,
y la fiesta es Dios,
en ese preciso momento
en el que me quedo solo
siempre hay un invitado que se me acerca
y dice
“¿Eres el qué se robó los ochenta libros de la Fil?”
Todo se queda en silencio
y la cerveza está quemada.
Soy ochenta Uribe,
Soy el Robin Hood de los libros,
Soy todos los ladrones.
Me acuerdo qué los tornados
siempre van para abajo
como los hoyos negros
como la FAMA.
Uno que otro invitado
comienza a reírse
cuando paso junto a él,
otros hablan en voz baja
(pareciera que la raza humana
estuviera hecha para la doble moral)
o simplemente se quedan callados
para hacerme
sentir incomodo,
confuso
y me pregunto si la redención
o es un camino lleno de árboles
con dientes de león
que al pasar por él todas
las partículas se desprenden
y te envuelven en un suspiro
o es como una terrible,
terrible resaca.
Puedo hablar si quiero
con ellos, los invitados,
puedo discutir, negar, coincidir
si robar libros
está bien
o
está mal
incluso puedo
pelear a golpes con ellos,
si lo deseo,
pero en todas las veces,
en las que estoy a punto de asumir
el papel que “ellos” quisieren que asuma
los perros me gritan
desde el otro lado de la fiesta:
“¿Qué eres?”
puffffffffffffffff splashhhhhhhhh
y la música tiene de nuevo su beat
la cerveza está helada
y les grito:
“¡Soy el que se robó los libros!”
y los perros se alborotan
y me señalan,
asienten,
aúllan,
y les grito extasiado:
“¡Soy un perro romántico!
ar ar argwww arrrrrrggg,
y se miran entre “ellos” perdidos
y les grito desesperadamente:
“A nosotros,
los perros,
nos invitaron a la fiesta
para invadirla de fuego
del único fuego
que no hace combustión”
y los invitados no entienden,
dicen tonterías,
siempre va haber ruido
y locura
la fiesta es nuestro motivo de existencia
y los perros aúllan
y por momentos
en serio creo que
explotamos.

Escucho miradas… / Paloma Estrada



Escucho miradas, veo voces

las cuales en un día común para mí

siguen siendo nada,

porque lo único que tengo, siento y entiendo

es que solo yo puedo ser la mejor crítica.

No me importa nada más que solo encontrarme,

solo saber quién soy y que hacer.

Los días pasan y yo tan solo siento que he cerrado mis ojos un instante,

ya ha pasado años y yo no me he encontrado,

sigo saliendo, sigo buscándome, pero aun no me encuentro.

Estoy cansado y viejo no he podido no he podido encontrarme,

estoy caminando, busco un nombre y una fecha.

Aunque no lo creas ya me encontré ya sé que hacer.

El nombre que buscaba era el mío,

la fecha era el día de mi muerte,

ahora ya sé que hacer,

es acostarme y dormir

muy tranquilo pues ya no debo nada, ni dejo nada pendiente,

dormir es lo único que quiero.

La carrera / Jesús Alfonso Silva Iñiguez


Los autos son una pasión que muchos comparten, forman grupos, clubs y demás asociaciones. Las más importantes son transmitidas por televisión; pero hay otras, unas de las que nadie quiere hablar. Son las de las carreras callejeras, donde ganar no es cuestión de dinero o prestigio mundial, ganar es algo que te llena de adrenalina, esa adrenalina que solo las cosas prohibidas te dan. Quizás el dinero en juego es muy poco en comparación a lo que se disputa en lo profesional, pero la sensación que dan las carreras clandestinas es muy adictiva. Y esa adicción llevó a nuestro amigo, Chip, a un lugar desierto por tratarse de una carretera poco usada, las carreras son concurridas pero no publicitadas. La carrera de autos a la que me refiero incluía dos bólidos de más de 500 caballos de fuerza, con una relación peso potencia que los hacía volar. La carrera terminaba en apenas 10 segundos o menos.
El carro de Chip era un Camaro 67 modificado para carreras cortas, pero exteriormente parecía un auto restaurado, para no llamar tanto la atención de las autoridades, pero el contrincante tenía un auto que parecía predestinado a competir con el Camaro; el Mustang 67, al igual que, el Camaro, potenciado de tal manera que pareciera más un carro, para museo, que para carreras. Los contrincantes se conocían de toda la vida, al ser primos hermanos. Se vieron uno al otro sin cruzar palabras; pues una rencilla familiar los alejó años atrás, ahora las carreras los juntaban uno al lado del otro, y volvieron a intercambiar miradas pero ahora desde los autos. Uno, dos, tres, una fanática de la velocidad daba la largada:
 
los primos aceleraron a fondo, los carros se comportaron como lo que eran Bólidos con una potencia infernal, que re rebasaban uno al otro, llegando a la meta, marcada únicamente con el espray usado en los partidos de fútbol, para marcar la distancia de la barrera, pero no era la única marca se colocaba una cámara en la línea de llegada, y Chip, ganó por poco, al mismo tiempo su primo golpeaba el volante lo más fuerte que podía y maldiciendo su suerte, pero en ese momento las sirenas de las patrullas sonaron fuerte y ellos continuaron acelerando, ahora para escapar de la policía. Cuando, Chip, escapó fue en una dirección y su primo en otra, para tener más posibilidades de perder a los patrulleros, Chip, corrió como si lo siguiera el demonio y pudo meterse en el taller de un amigo al que le marcó mientras huía, desde su llegada tuvo la impresión de que algo andaba mal, pese a su escape exitoso.
Al siguiente día supo que su primo no logró escapar, perdió el control y terminó estrellado bajo un puente y se llevó una imagen de la Virgen María, que servía de lugar de oración, para los camioneros; Chip, recuerda con tristeza a su primo, pues aunque las disputas familiares los separaron, su primo fue su mejor amigo de la infancia y adolescencia, pensar que la reunión familiar, que se dio entre los primos fue para seguir a disputa ahora en formato de diez segundos, pudieron por última vez pensar en el otro mientras corrían y pensar más después de la carrera, Chip sabe que su primo murió como siempre quiso, yendo rápido corriendo como siempre soñaron que sería, quizás, Chip, ganó la carrera, pero su primo llegó primero a lo que ellos llamaban, el Valhalla, de los corredores.

Termita el adiós… / Manuel Rayas


Termita el adiós, cava en el cielo

Traga Dársenas

Estrellas

Nube de polvo

Vuelve desde lo añejo

( Mapa Astral)
Rudimentaria ojiva en traslación

( Que el insecto perviva
En la aproximación del ojo

Por ojo sepa imaginar desventura)

Diente por diente

Hasta el recuento

( De un momento delirante
Álgido de luces)

Cohete

Fulminante Pólvora
Concavante 16


(Metralla a medio camposanto)

Cava abismos en el cielo

Trepidante insecto

(Un tramo más de incertidumbre danza)

Para saber si está cerca el ocaso

La venganza del implacable sol

El agujero negro

(Donde caen todos los cielos
Librados del tiempo.)

Después que las estrellas

Conjuraron a Tauro

Tengo la mirada empecinada en el cielo
¿Cómo se da la primera luz de los astros

¿La conjugación de los aires?


No hay aire se trata de desdibujar las aristas

Para comprender las espadas

Si muero / Saturnino Ruiz Roque


Si muero, ¡busca, hasta el confín del universo!
No me despiertes, ¡de la pálida, sombra a muerte!
Mientras abunde la vida, ¡no perdamos tiempo!
La vida terrenal, ¡es muy breve! ¡Sólo un sueño!

¡Tanta aurora! ¡Ocaso! algún día, ¡serán recuerdos!
No me llames por mi nombre, ¡estaré ausente después!
Realmente, ¡amar! ¡Quieres intensamente! ¡Ámame hoy!
Después partiré, ¡cuando me haya! ¡Por siempre ido!

¡Preguntarás! si el beso, ¡que anidaste ardiente era!
Las hojas, ¡que en otoño! ¡De oro bañan, los paisajes!
Fecunda el bosque, ¡entre tierra! ¡Para primavera!

Entonces, ¡surgirá! ¡En todo! ¡Un sentido a la vida!
El alma, ¡que guardaste y nunca! ¡Diste amada!
¡Embriágate ahora! Penetra, ¡mi alma en tus besos!

UN SOUNDTRACK SOBRE LOS EFECTOS DEL LENGUAJE / Samuel Rodríguez


—Impulsos creativos, creativos impulsos, im-crea pulsos, imputivos creatisos— algo está mal en mis códigos. Mientras veo una película de un matemático, escruto un libro que me dice como plantear una hipótesis y me revuelve y no le creo y me invento variables inconexas (escribo, atisbo, respiro, presisto) y me preocupo por integrar la sístole y derivar la diástole a las palabras, formando armaduras poéticas que se enlazan con tornillos veloces y les doy vuelta a las palabras y las torturo con mi pluma ardiente y me gritan y me dicen que no las desordene, que así es el lenguaje, que nada voy a ganar con esto, que es torpe tratar de desfigurar el lenguaje, que es peligroso, que el destino de los malditos es la esquizofrenia, la locura, el suicidio y no les hago caso y hasta escribo “impulsos creativos” con números, con signos, con manchas, con saliva y con todo lo que aglutine la materia y me revuelvo y me canso y me detengo y tiemblo y mi codo también tiembla y mi razón desiste—siempre desiste— y los impulsos terminan—siempre terminan—cuando recibo una llamada de una mujer, una mujer que dice que me ama pero no me entiende, ni yo la entiendo, hasta que los dos decimos la palabra “Hola”, de la misma manera que hace 25 años dije la palabra “Hola” sin saber porque, pero me entiendo y ella me entiende y todos nos entendemos y las palabras se burlan—siempre se burlan—de este lenguaje heredado,
de este l               e al que no me acostumbro.
              e          j
                 n    a
                   g u

Entre la espada y la pared / Iván Segura Muñoz

 Las élites políticas de Jalisco durante la intervención y el Segundo Imperio

Capítulo III

Jalisco, un estado en el ojo del huracán

Desde el inicio de la vida independiente de México, el recién conformado estado de Jalisco había participado activamente en la política y proyectos nacionales; durante el siglo XIX numerosos políticos jaliscienses destacaron a nivel estatal y nacional, asimismo Jalisco ocupó un papel relevante por medio de sus políticos durante el movimiento de reforma liderado por Benito Juárez, y tras el conflicto desatado por dicho movimiento, sería en Jalisco donde se desarrollarían muchas de las batallas de esta guerra . En el centro de este ambiente se encontraba Guadalajara, capital de la Nueva Galicia y posteriormente del estado de Jalisco; fue esta ciudad el epicentro de toda la política de Jalisco y por consiguiente el lugar de mayor actividad política.

Sin embargo a consecuencia de ello la capital también tuvo que sufrir situaciones difíciles debido a los múltiples sitios y enfrentamientos a los que fue sometida por parte de los dos bandos beligerantes durante la guerra de reforma. No obstante, al mismo tiempo que se llevaba a cabo la guerra, los políticos jaliscienses mantuvieron su lucha defendiendo su ideología mediante la pluma o la espada, posteriormente tras el triunfo de Juárez, personajes como Pedro Ogazón, Ignacio L. Vallarta, entre otros, consiguieron no sólo el renombre propiciado por la victoria, sino que tomaron las riendas del gobierno Jalisciense en sus manos, después de haber sido disputada en numerosas ocasiones por ambos bandos.

En general, la gubernatura de los liberales vencedores se vio obstaculizada por diversos factores tales como: la falta de recursos monetarios que obligaron al gobierno a ejecutar préstamos forzosos, la actividad de gavillas y tropas rebeldes en el estado aumentaron la inseguridad, siendo las tropas de Manuel Lozada las que más problemas dieron al nuevo gobierno , y finalmente el gobierno tuvo que suspender sus reformas y enfocar sus recursos en preparar fuerzas para defender nuevamente el estado frente a un nuevo enemigo; pues, la difícil situación económica del país propició un conflicto con España, Inglaterra y Francia, concluyendo con la invasión de fuerzas francesas a territorio mexicano.

Fuimos / Juan Amador Gaya


Fuiste ese suelto deseo ardiente de cabalgar en mis tierras firmes sumergida en fértiles caudales.
Fui el volumen grave el día completo en tus pupilas.
Fuiste dulce café negro de líquidas noches. Noches consumidas hasta el epílogo.
Fuimos fragilidad inquebrantable.
Fuiste el desalojo de mis sábanas que hoy son tierra de nadie.
Fui cabal en tus antojos, desde los más bebibles hasta los sólidos caprichos intangibles. Tracé la idea en la médula de tu piel llamada libro vivo, así solo seguías la línea del sutil gorjeo que emanaba desde tu pecho hasta tus coquetas narinas.
Fuiste esa musa que abría mi mente haciendo retozar mis dedos en tus acordes mañaneros. Acordes que me enseñaron que despertar no es lo mismo que amanecer. Que hay cosas que no se enseñan, se aprenden.
Fuimos ese desorden de palabras y sentimientos que ocuparon muchos GB en nuestros corazones los cuales han muerto de asfixia. La intensidad nos saturó, porque desde el prólogo improvisamos, nos leíamos claros como dos copas de vino tinto barocco bivarietales. Primitivo y puglia.
Fui
Fuiste
Fuimos.

Cuando te conocí / Giovanni Ríos



Al día de hoy sigo esperando si tu "hasta luego" era en serio

La última vez que nos vimos tú usabas un vestido de rosas corte "a"

Mientras veía que bajabas por las escaleras no pude pensar en algo más hermoso

Tomé tu mano y nos dirigimos a la cita más cursi que mi mente pudo procesar

Desde hace años me encuentro aquí, esperando alguna señal

Un ligero humo que me diga en donde te encuentras

Voy a mirar el reloj durante horas, dicen que eso ayudará

Hace 2 noches pasé a un bosque, rumoran que es ahí en donde encuentras a los dioses

Supuse que ellos sabrían si estabas cerca o si llegarías a volver

Grité por sus nombres una vez y nadie contestó, cuando volví a hacerlo una ardilla corrió.

Fue mi culpa por gritarte que te fueras y a medio camino detenerte

No creo que ningún ser pueda perdonarme lo que hice

Pero si aun así lo hicieran, no podría aceptar dicha vergüenza

Y aunque te esté buscando todos los días, espero no encontrarte.

Porque sé que si te encuentro y aceptas tomar un café conmigo

Ya no habrá más conversación, no habrá anécdotas acerca de lo ridículos que fuimos a los 7

No podré sentarme a tu lado a reír por horas de un chiste que sólo tú y yo conocemos

Sería prácticamente imposible hacer el amor y mirarte a los ojos

Podemos compartir un cigarro y un trago de algún whisky barato que robé de la licorería

¿Pero no sería demasiado absurdo a este punto?

Si quitas esa inocente sonrisa y caminas un poco hacia mí, sería grandioso

Mas ya es muy noche para invitarte a pasar y prepararte un café amargo, de esos que tú amas

¿Te podrías ir, por favor?

Guadalajara / Cesar Corona



Cuando supe de ti ya eras enorme
ya abrazabas toneladas de asfalto,
Concebida fuiste en la grisácea vena
de San Juan de Dios,
desde siempre afable,
Cálida de piel y aliento.
Guadalajara tan religiosa
Te das golpes de pecho en catedral de día
y de noche socializas en “Caudillos”,
siempre tan bacana, como sensual
con tu gente llamados tapatíos,
tan generosa eres que los migrantes
llegan y no se van.
Tan llena de artistas
conocidos como
limpia vidrios
cadeneros
dale dale
támaros
cuicos
y políticos que son los mejores.
Como diría la canaca:
¿y mis 50,000 pesos?
Sabes conquistar corazones
de propios y extraños,
Sabes coquetear sin reboso
Y con delantal a la orden,
Como diría una niña Polett:
“Le asusta pero le gusta”.
Tus noches no son muy obscuras
Llena eres de luces,
Te luces de ocurrencias
ocurrencias como zona 30
30’ tardo en cruzar tu centro
centro molacho y enjuto.
Eres dueña de tu propio mundo y
sabes entregárselo a la gente que te ama,
Entiendo que no debemos atragantarnos contigo
porque los que vivimos en ti sabemos
comerte a bocados.
No dejas de crecercada año añades toneladas de concreto,

asimétrico rostro de profundas cirugías
y aún así tienes tu centro de gravedad.
Tan tapatía,
Tan compleja como un ¿eda?
Tan sencilla como un ¡hey!
Nutres las mentes de los tuyo con tus hijas,
Tus hijas llamadas universidades.
Se dé una llamada CUCSH
Dicen que ella intenta alimentar almas
pero se queda corta.
De nada le sirve al que escribe juntar piedras
si no las sabe lanzar.
Guadalajara, tan lejos de Dios
Y tan cerca de catedral.

Transcurrir / Carlos Islas



Ríos corren al mar,

Una luna, luego otra,

Igual allá en el cosmos.

acá

los ojos se abren,

despiertan las plantas,

el reloj circula rápido,

las mentes trastornadas

de aquí para allá.

Frente al monitor

un falso reposo,

falacias como verdades,

sueños ajenos.

En el silencio…

la luz.

Odisea / Alejandro Farías

 

Olvidarse de la odisea de ser.

Sucumbir ante la luz y caer en dispersión de silencios.
En fractura de reflejos

en bambolear de vértigo

encima de mí

en alaridos equidistantes

que pronuncian palabras destruidas

por ese vacío que es mi voz.

Ese que mide la soledad a medio sol

esa que se zambulle en el suelo

y pasa al piso de abajo.
Ese que flota sobre el infierno

que es uno mismo mordiéndose las ideas.

Los recuerdos y las vacilaciones.

Esas que construyeron murallas de insatisfacción.

Ejércitos que añoran desaparecer.

Sólo deseaba permanecer.

Sólo me tiré al desafío de crecer.

Solo me inundé en tu sombra.

En silogismos de tortura.

Que se encadenaron al cielo.

En estampida.

En retruécanos averiados.

En guaridas inexistentes.

En mi cuerpo borroso:

fuego que arde en la oscuridad.