Algunas sirenas son media mujer
Algunos hombres son medio centauro
Benjamín Prado
Tienes en tus muslos el poder tan insondable
De Transmutar las cenizas en madera
De mis quemadas naves bautizas nobles navíos
Arrugas mis solapas con el calor de tus silencios
De vuelta a los caminos de un exilio ya cercano
Dejas un sendero marcado no por arrastre, si por coraje
Ese coraje de quien anda cantando a José Alfredo
Silbando al aire, tan sabor a capricho, tan olor a tequila.
De Una hoja seca de naranjo vuelves a ser semilla
Te atreves a perderme el respeto lanzando el primer beso
Acercas tu sexo a mi guitarra, tu mirada hacia la nada
Recordaste el destino de tus vapores; mi luna
En el germinado de tus piernas crece bañado por el sudor
Ese sabor a girasoles y amaranto, estructurado panal de luz
De tiempo y relojes que calman la impaciencia de un agonizante
De Un primer auxilio que nunca llegó, ambulante sirena de sal
Vuelves sobre mis pasos, bailas sobre mis suelas
Creas con mis cenizas tus maderas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario