La transformación comenzó con un implante de tecnológicos fluidos y pequeñísimos circuitos electrónicos de silicio y litio en su mano derecha. Así nació el primer hombre-smart. De a poco sus piernas fueron sustituidas por prótesis Nike de altísima tecnología con más de tres mil sensores y un avanzado software que procesa los datos a una velocidad jamás vista. La franja rojiza que circundó sus muñones cicatrizó y se fusionó con el borde metálico de la prótesis. A sus brazos se le retiró la carne, el cúbito y el radio fueron reforzados con una cobertura de fibra de carbono y sobre esta estructura se montaron un par de motores. Se insertaron electrodos conectados a terminales nerviosas: retirar calota craneana, pinchar con agujas de acero quirúrgico, subir el switch.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario